Llega el verano, el buen tiempo y con ello las vacaciones. Desde Fernando de Noronha apuestan por un turismo más sostenible. En este pequeño archipiélago de Brasil, considerado uno de los más bonitos del mundo, donde habitan tortugas, delfines y una de las mayores colonias reproductivas de aves marinas del Atlántico Sur Tropical, se encuentra un laboratorio de energía alternativa, en pleno entorno salvaje, creado con el objetivo de llevar la electricidad a sus habitantes sin contaminar este espacio natural.
A pesar de considerarse uno de los mayores paraísos de Brasil y de tener unas estrictas medidas ambientales, no solo por el entorno sino también por la vida animal que hay, la contaminación está presente de forma constante. El tránsito de aviones y la producción de energía, generalmente con diesel, son un tema un tabú en la zona.
Ahora, Iberdrola, junto con las autoridades del país, ha construido ya dos centrales solares con las que producir luz limpia. Experimentan con nuevas fórmulas para la reducción de emisiones contaminantes trabajando en proyectos como la obtención energía a través de residuos, solucionando así otros problemas de la isla. El cuidado del planeta es cosa de todos y cuanto antes se encuentren soluciones, antes podremos disfrutar de un mundo limpio y sostenible.
