Megaconstrucciones hay muchas, pero casi ninguna empresa afronta un reto como construir un gran parque eólico en el mar. Bueno, Iberdrola, sí. Hace 2 años fuimos pioneros en avanzar con las renovables en tierra, y ahora, en el mar.
El Báltico alemán es testigo del nacimiento de Wikinger, nuestro segundo parque marino tras el de West of Duddon Sands en Inglaterra. Pero hacerlo realidad no es nada fácil: la gente Iberdrola se enfrenta a temperaturas bajo cero y olas de varios metros.
Desde febrero estamos instalando ¡70! enormes molinos, de 2.000 toneladas de peso cada uno y casi tan altos como la Torre Eiffel.
Los 350 megavatios de Wikinger generarán, a finales de año, la energía que consumen 350.000 casas, evitando emisiones de casi 600.000 toneladas de CO2 al año.
Compañeros de Iberdrola viven día y noche en la subestación, y sufriendo las inclemencias del tiempo para lograr instalar los molinos en plazo. Pese al frío del invierno, pese a las condiciones del mar y pese a los temporales que sacuden la zona, la #GenteIberdrola siempre está al pie del cañón para conseguir la mejor energía del viento… y la más limpia.
We renovables