Mirar en un semáforo al coche de al lado y ver que es eléctrico es cada vez más habitual. Ya sea de carsharing o particular, su uso se va fomentando, pero es cierto que esto sucede sobre todo en ciudad. ¡Lancémonos a las carreteras para viajes de larga distancia!
Para demostrar que es posible, hemos realizado un viaje Madrid – Valencia parando a recargar en nuestro punto de recarga rápida situado en Cuenca. Una distancia de 357 km separan a la capital de la playa valenciana, un recorrido que se puede hacer en menos de cuatro horas, contando ya con la parada técnica de 25 minutos a mitad de camino para recargar.
Es necesario un equilibrio entre el coche y los puntos de recarga, puesto que sin un coche que tenga una autonomía superior a los 300 km o que no admita la carga rápida, el viaje no sería viable. Sin embargo, con un coche con autonomía suficiente, la clave está en salir de casa con la carga a tope o al menos para 200 km (lo que tendría un coste de 1,45€ si se recarga con el Plan Vehículo Eléctrico).
Sin ruidos, sin contaminar, con una ligereza especial al acelerar y una sensación reconfortante por ir en coche eléctrico llegarás a la playa tras recargar menos de media hora por 6,25€ a una potencia de 50kW. A través de nuestra app de Recarga Pública puedes controlar dónde están los puntos por toda España, ver su disponibilidad, reservarlo, recargar, pagar, ver el tiempo de recarga… ¡todo!
Para seguir impulsando la movilidad sostenible, planeamos instalar 25.000 puntos de recarga hasta 2021 en hogares, empresas y zonas urbanas e interurbanas. Concretamente, hasta un total de 1.600 puntos en la Comunidad Valenciana, donde recientemente hemos inaugurado dos nuevos puntos en Villajoyosa (Alicante). Moverse por la Costa Blanca ya es una realidad, ¿a qué esperar para recorrerte sus playas? #MuéveteEnVerde