Wikinger: tecnología española al servicio de la gente y el planeta

Seguro que muchos nos hemos fijado cuando vamos de viaje en los grandes molinos eólicos que se dispersan por la geografía y nos hemos dado cuenta de que cada vez hay más. Pero ¿y si te dijéramos que también existen en el mar?

Sí, estos parques eólicos no son ciencia ficción, pero son pocos los que apuestan y afrontan retos tan espectaculares como los de levantar un inmenso parque eólico en gélidas aguas y bajo condiciones climáticas adversas.

En Iberdrola, hemos inaugurado uno de nuestros mayores estandartes en aguas del Mar Báltico, el parque eólico marino de Wikinger, y nosotros nos hemos puesto el traje de marinero para contároslo.

Tras dos horas de travesía marina, entre fuerte oleaje y rachas de viento (justificando así su enclave), los 70 molinos del parque emergen imponentes entre las aguas bálticas para dejar boquiabiertos a los allí presentes. Navegar entre estos gigantes eólicos es una experiencia difícil de olvidar y nos ha permitido comprobar in situ la magnitud de este megaproyecto.

Cada molino, con una altura casi como la Torre Eiffel, con un diámetro de sus palas de 135 metros y con un peso de 2.000 toneladas cada uno, da cuenta del reto técnico y tecnológico que ha supuesto el proyecto. Por si fuera poco, el parque lo preside la flamante subestación Andalucía, corazón del mismo y encargada de recoger la energía de los molinos y transformarla para llevarla hasta tierra.

Wikinger tiene un fuerte carácter español, ya que Iberdrola ha encargado a empresas como Navantia o Windar la fabricación de parte de los componentes en Cádiz, Galicia o Asturias, permitiendo la reconversión de los astilleros públicos y su entrada en nuevos mercados.

Actualmente, Wikinger produce electricidad para 350.000 familias alemanas y evita la emisión a la atmósfera de 600.000 toneladas de CO₂ al año. Por si fuera poco, ya está en marcha su ampliación con los parques eólicos marinos de Baltic Eagle y Wikinger Süd, que formarán el mayor complejo marino de este tipo en el Báltico.

Wikinger nos demuestra una vez más que la tecnología siempre debe estar al servicio de las personas y del medio ambiente. Gracias a la #GenteIberdrola por haber hecho posible este nuevo hito de la ingeniería por un planeta más limpio y sostenible para todos.