Gestionar las redes que llevan la electricidad a los hogares e industrias es una tarea esencial. A eso nos dedicamos en el Centro de Operación de Distribución (COD) de Iberdrola en Toledo, donde gestionamos la red eléctrica desde las interconexiones con las líneas de transporte y con algunos generadores, hasta el punto de alimentación que llega a los hogares, empresas e industrias.
En ese camino, tenemos que vigilar que la energía fluya sin contratiempos y coordinarlo con los necesarios trabajos de mantenimiento que se realizan en la red y la resolución de averías e incidencias. Además, proporcionamos información a consumidores y a la administración pública de los posibles cortes de suministro, tanto programados como imprevistos.
En esta labor diaria, las prioridades para los COD como éste son la seguridad de las personas, el medioambiente y la seguridad de las instalaciones, en este orden. Al cabo del día se gestionan multitud de trabajos en red, por lo que es vital que exista un centro que coordine estas acciones, que esté siempre alerta y con capacidad para responder de forma rápida y eficaz ante los imprevistos.
Si hacemos memoria, podemos observar una notable evolución tecnológica en estos centros de Iberdrola. Hemos pasado de contar con equipos operados por personal local, a tener prácticamente toda la red telecontrolada, existiendo además multitud de elementos, como subestaciones y centros de transformación, supervisados y operados únicamente por los COD. Hace años, teníamos paneles en las paredes que reproducían la red y donde actualizábamos su estado con el uso de chinchetas y cintas adhesivas. A día de hoy, contamos con el moderno sistema de telecontrol Spectrum, que integra la red y el telemando registrando las incidencias de manera gráfica con información de los puntos de suministro exactos a los que está afectando una avería.
Pero la evolución tecnológica no queda ahí. Iberdrola se encuentra inmersa en el proceso de implantación de la telegestión de la medida en todos los puntos de suministro a los que atiende, incrementando la supervisión y el control de muchas instalaciones de media tensión, lo que supone que está aumentando de forma muy importante el número de elementos sobre los que operar a distancia desde el COD. Del mismo modo, ha crecido la información de lo que está sucediendo en la red.
El personal de estos centros tiene que enfrentarse diariamente al reto de la constante evolución tecnológica. La red era únicamente de consumo y ha pasado a ser una red en la que se ha integrado generación distribuida, lo que supone hacer frente a las necesidades de esta generación que, en ocasiones, no va pareja al consumo. Se ha pasado de tener redes donde la aportación de energía reactiva era esencial para el mantenimiento de tensiones, a una red donde existe un exceso de energía reactiva y requiere de una atención especial y de una gran profesionalidad para el mantenimiento de sus parámetros en momentos de baja demanda, como pueden ser las noches, fines de semana y periodos festivos. En esta labor tiene especial importancia la coordinación que realizan los COD con el operador del sistema, con los distintos centros de control de generación y con los propios productores conectados a la red de distribución.
Los Centros de Operación de Distribución de Iberdrola –como este de Toledo- cuentan con una plantilla de unas 35 personas para gestionar la red y la información que se demanda las 24 horas del día y los 365 días del año. Son expertos en la gestión de la red de distribución, tanto desde el punto de vista de seguridad de las personas como de seguridad del suministro, optimizando y sacando el máximo partido a las mejoras tecnológicas que día a día se introducen en la red, convirtiendo así a Iberdrola en una de las empresas eléctricas con mejores índices de continuidad de suministro en España.
